Pénjamo, Guanajuato.- Un adulto mayor en condición de calle vive desde hace algunos días en las instalaciones de la central de autobuses de Pénjamo. No recuerda su procedencia ni los datos de sus familiares. Algunos ciudadanos se organizan para llevarle de comer, pero urgen el apoyo de las autoridades para que reciba una atención integral.
Desde hace una semana, una mujer de más de 60 años de edad vive entre unas sábanas que colocó en la barda perimetral de la central de autobuses de Pénjamo. Al parecer, vivía en la zona centro de la ciudad, pero, según su relato, fue desalojada y echada a la calle por su propia hermana.
Viajeros y personas que viven por la zona han hecho lo posible para hacerle llegar alimentos necesarios para su manutención. Sin embargo, aseguraron que la persona requiere de una atención integral, por lo que solicitaron el apoyo de alguna organización de asistencia social o del DIF municipal.
“Tiene como una semana viviendo aquí. Llegó sola y se quedaba a dormir a la intemperie, sale a recoger botellas que luego vende; es de lo que vive por ahora. Esperemos que alguien pueda ayudarla”, señaló una usuaria de la central de autobuses, quien, al igual que otras personas, le ha brindado comida.
“Ojalá que esta publicación llegue a las autoridades. Un apoyo realmente le puede cambiar la vida. Esperemos que se le pueda reubicar a un lugar donde pueda ser alimentada, pero también donde se pueda ver por su salud. No sabemos cómo esté, si tenga algún padecimiento o no. No es mucho lo que habla, por eso no sabemos mucho de ella”, concluyó.
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