Pénjamo, Gto.- Habitantes de varias colonias siguen utilizando el Río Huascato como basurero, vertiendo en él toda clase de desechos, desde escombro hasta la basura residencial. Este río atraviesa la totalidad de la cabecera municipal desde la presa La Golondrina y recorre además más de 8 kilómetros hasta su intersección con el Rio Turbio, convirtiéndose en un foco de proliferación de basura.
El Río Huascato nace en las compuertas de la presa La Golondrina y a lo largo de casi tres kilómetros recorre la totalidad de la mancha urbana pasando por las colonias Loma Bonita, El Beltrán, La Rinconada, El Tolento, Arroyo Hondo, la Zona Centro, el Huarapo y Nueva Esperanza, a partir de ahí, recorre otros 8 kilometros hasta su intersección con el río Turbio, pasando por las comunidades Estación Pénjamo, San José de los Sabinos, Labor de Reyes y La Granjena.
A lo largo de todo su recorrido, los habitantes que viven cerca del cauce lo utilizan como basurero y para verter toda clase de desechos, principalmente en temporada de lluvias. Durante la época de sequía se pueden apreciar escombro, rocas y otros remanentes de esta actividad. También existen negocios que vierten en sus aguas negras, un rastro clandestino que se ubica en la Zona Centro de la ciudad y una granja que se encuentra en la colonia El Huarapo, han sido constantemente denunciados por los habitantes.
Poco o nulo interés social por el Río Huascato
Las condiciones en las que se encuentra el Río Huascato ponen en evidencia el poco o nulo interés social para mantenerlo en buenas condiciones, pues, a pesar de que autoridades y ciudadanos realizan campañas de limpieza, al poco tiempo el rio Vuelve a presentar una cantidad importancia de desechos.
Es por ello que un sector de la población ha urgido al gobierno municipal que se aplique en las sanciones correspondientes a los responsables con la finalidad de que se pueda generar un precedente que obligue a los ciudadanos a no seguir fomentando este círculo vicioso.