Ciudad de México, México.– Los recientes aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a casi todos los países del mundo han generado una creciente preocupación en el sector privado estadounidense.

 
Los aranceles impuestos por Trump podrían elevar los precios de productos importados como el café, afectando directamente a los consumidores estadounidenses (Foto: Twitter)

Con un impacto directo en los precios de los productos importados, especialmente el café, los aranceles podrían generar un aumento de hasta un 15% en los costos para los consumidores de EE. UU.

“En Estados Unidos no podemos cultivar mucho café. Importamos unos US$8.500 millones al año. Los aranceles anunciados ayer ascenderán a al menos US$1.250 millones. Eso es un aumento de impuestos del 15% en tu café de la mañana”, escribió el jefe de políticas de la Cámara de Comercio de EE. UU., Neil Bradley, en la red social X.

Su comentario refleja el malestar del sector empresarial, que teme que las medidas afecten el bolsillo de los consumidores.

El impacto de los aranceles: ¿Quién paga realmente?

 
Los aranceles impuestos por Trump podrían elevar los precios de productos importados como el café, afectando directamente a los consumidores estadounidenses (Foto: Twitter)

Un arancel es una tasa impuesta por un país a los productos importados. Si una empresa estadounidense quiere traer productos como madera o café desde el extranjero, deberá pagar una tarifa adicional en aduanas, que luego podría trasladarse al consumidor final.

De este modo, los aranceles funcionan como un aumento de impuestos que podría desencadenar un incremento en los precios de productos básicos.

Analistas de todo el mundo predicen que las nuevas tarifas elevarán los costos para los consumidores estadounidenses, generando inflación.

Sin embargo, desde la Casa Blanca, Trump defiende que los “aranceles recíprocos” permitirán equilibrar las relaciones comerciales internacionales, argumentando que solo habrá “ligeras consecuencias negativas” para la economía local, mientras que se generarán más empleos en el país.

La visión de Trump y los economistas

Trump, durante su primer mandato, ya había recurrido a los aranceles como parte de su guerra comercial, especialmente con China.

 
Los aranceles impuestos por Trump podrían elevar los precios de productos importados como el café, afectando directamente a los consumidores estadounidenses (Foto: Twitter)

En esa ocasión, afirmó que “miles de millones de dólares están entrando a las arcas de Estados Unidos debido a los aranceles que le estamos cobrando a China”, aunque economistas rápidamente señalaron que, en realidad, los aranceles los pagarían las empresas estadounidenses que importan productos chinos.

En su discurso ante el Congreso en marzo de este año, Trump insistió en que los aranceles tienen como objetivo hacer que EE. UU. vuelva a ser una nación rica y poderosa.

“Habrá una pequeña perturbación, pero estamos bien con eso. No será mucho”, agregó, minimizando las posibles repercusiones.

Por su parte, Scott Bessent, secretario del Tesoro de EE. UU., afirmó que los aranceles podrían tener un impacto limitado en los precios, y sugirió que el aumento de precios por un único ajuste podría ser transitorio.

“Nada es más transitorio que los aranceles si se trata de un único ajuste de precios”, argumentó Bessent.

Desde el sector empresarial, las preocupaciones sobre los aranceles son claras. Neil Bradley, de la Cámara de Comercio de EE. UU., advirtió que los nuevos aranceles serán percibidos como un aumento de impuestos que afectará directamente a los consumidores.

“Estos amplios aranceles suponen un aumento de impuestos que elevará los precios para los consumidores estadounidenses y perjudicará la economía”, afirmó.

La directora ejecutiva de Best Buy, Corie Barry, también expresó su inquietud.

 
Los aranceles impuestos por Trump podrían elevar los precios de productos importados como el café, afectando directamente a los consumidores estadounidenses (Foto: Twitter)

“Prevemos que los proveedores de todo nuestro inventario transferirán algún nivel de costos arancelarios a los minoristas, lo que hace que los aumentos de precios para los consumidores estadounidenses sean muy probables”, señaló Barry.

A pesar de estas advertencias, algunos sectores aún buscan alternativas para mitigar el impacto. Por ejemplo, los importadores de productos como la electrónica podrían intentar buscar nuevos proveedores de países con menos aranceles. Sin embargo, esto no siempre es posible, y algunos, como Volkswagen, ya han anunciado que cobrarán una “tasa de importación” a partir de fines de abril.