Guanajuato, Gto.– “A mí se me hizo muy fácil decir: ‘Aparte, baratísimas, 400 pesos’, pero inmediatamente después de que lo dije, me cayó el veinte cuando vi la cara de las personas a las que les estaba contando, que no todas tenemos las mismas posibilidades de comprar algo así”.
Confesó que dijo eso como para que las demás mujeres se compraran una peluca: “pero vi sus caras y entendí. Yo me atiendo en el Hospital General y muchas de las personas que asisten ahí son de bajos recursos, y quizá pensaron que, con 400 pesos, mejor compran la despensa y no una peluca”.
Entonces les prometió llevarles una, pero pensó que no sería suficiente, porque eran 20 las que se atendían en un solo turno. “Pensé en mínimo lograr esas 20. Empecé a publicar mi historia en redes sociales y, a las tres semanas, ya tenía 100 pelucas donadas por mucha gente que se conmovió. Yo sé lo que se siente quedarse sin cabello y la inseguridad que da. También sé lo que se siente que te digan un piropo cuando te pones la peluca, y eso es lo que quiero que les pase a las demás mujeres”.

Amable y divertida, Fátima Carmona contó que no es solamente que se caiga el cabello de la cabeza, también las cejas y las pestañas. “Verte en el espejo es como parecerte a Voldemort; hoy lo digo riéndome, pero es muy shockeante. Yo no me podía imaginar con un turbante en la cabeza, pero no tanto por mí, sino por la reacción de las personas que me iban a estar preguntando qué me pasaba; yo no le quería estar explicando a todo mundo por qué traía un turbante en la cabeza”.
Confesó admirar a las mujeres que pasan por este proceso y salen a la calle con turbante o así, pelonas: “yo no pude, y a mí una peluca me dio la posibilidad de atender a mis pacientes, de salir a la calle y seguir sintiéndome bonita. Sí fue un punto clave tener una peluca bonita, porque sí hay unas que se ven muy falsas, muy sintéticas”.
Proceso difícil
Sentada justo en el sillón donde escucha a sus pacientes, esta vez Fátima lo usó para contar su historia: “La quimioterapia es un medicamento que te ponen en la vena. Desde ahí empieza el terror para muchas, porque tienen las venas muy delgadas. En mi caso eran cuatro horas; hay gente que se avienta ocho horas sentada en un sillón. En ese momento no duele, pero después viene la parte horrible, porque la quimio mata las células malas, pero también las buenas”.
Dijo que es mucho cansancio: “Pierdes el apetito, la comida te sabe a metal, empiezas a ver cómo se cae tu cabello. Yo tuve dermatitis; hay a quienes les da mucho vómito y mareos. Esto es sólo lo físico, pero en la parte emocional también es muy difícil, porque ahora tienes que llevar una vida a la que no estabas acostumbrado, porque ya no puedes. Ya no se puede hacer ejercicio, desvelarte, ya no puedes comerte los tacos. El cáncer quita muchas cosas, pero también da otras”.

Dijo que en todo este proceso pensaba en sus niños (pacientes), sus amigos, su familia. “A pesar de que soy una persona soltera, sin hijos, nunca estuve sola; siempre, afuera de la puerta, había flores, comida, chocolates, dinero. Entonces, eso me dio mucha fuerza para no darme por vencida”.
Actualmente atiende a cerca de 45 pacientes por semana, de entre 2 y 15 años; nunca dejó de trabajar a pesar de su proceso. “La maravilla de los niños es que atienden tanto y aman tanto, que no puedo negar mis emociones con ellos, y ellos me han dado muchos ánimos”.
Hoy está lista para entregar las 100 pelucas que logró reunir e incluso pudo planear un evento con la ayuda de Trabajo Social del Hospital General, que se realizará a propósito del Día de las Madres, donde además habrá masajes gratuitos, peinados, maquillaje, tatuaje de cejas, juguetes para los niños, manicure y hasta show de magia, todo donado y gratis para las mujeres que padecen cáncer.
“Se logró gracias a un montón de gente con un corazón bonito, incluso hasta gente que ni me conoce, pero vio la publicación en el muro de alguien más”.
Ha sido una experiencia muy padre, algo increíble que, en menos de tres semanas, ya tenía las pelucas o el dinero para comprarlas”, platicó Fátima con una sonrisa y el anuncio de que dicho evento se realizará el 21 de mayo en el Hospital General de León.
Últimas noticias sobre estafas en Guanajuato
Punto Legal, un año después: ¿Cómo va el juicio por la estafa inmobiliaria en León?
La estafa: apuntes sueltos de un oscuro rompecabezas…
¡No caigas! Así te estafan con la Tarjeta Violeta a través de Whatsapp en Guanajuato