Ciudad de México, México.- En un giro significativo dentro de las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China, el presidente estadounidense Donald Trump anunció la imposición de aranceles del 55% sobre productos chinos, como parte de un nuevo acuerdo comercial preliminar alcanzado entre ambas potencias. El pacto, que aún debe ser aprobado por los presidentes Trump y Xi Jinping, contempla además que Beijing mantendrá aranceles del 10% a productos estadounidenses.
El acuerdo fue dado a conocer por Trump a través de su red social Truth Social, donde calificó el resultado como un “gran triunfo” para ambas naciones, y aseguró que la relación bilateral se encuentra en un momento “excelente”.
¿En qué consistió el acuerdo entre China y EU?
Uno de los puntos clave del entendimiento es el suministro de tierras raras por parte de China, esenciales para sectores estratégicos como la tecnología, defensa y energía limpia.
“Los imanes completos, y cualquier mineral de tierras raras necesario, serán suministrados por China”, detalló Trump en su publicación.
Estas materias primas son fundamentales en la producción de vehículos eléctricos, semiconductores y sistemas de inteligencia artificial, lo que convierte al acuerdo en un paso crucial para reducir la dependencia estadounidense de otros mercados más inestables.
Visas para estudiantes chinos: otro punto del acuerdo
En paralelo, el presidente estadounidense confirmó que su administración se compromete a aprobar visas para estudiantes chinos ya matriculados en universidades del país, una medida que busca reconstruir los vínculos académicos tras años de restricciones.
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Este gesto fue negociado como parte de una estrategia para mejorar el intercambio educativo y científico, en momentos en que Washington y Beijing intentan reducir tensiones en sectores sensibles.
Negociaciones en Londres tras meses de fricciones
El anuncio se da luego de dos días de negociaciones en Londres, las cuales siguieron a una llamada “muy positiva” entre Trump y Xi la semana pasada. Durante las reuniones, las delegaciones discutieron temas clave como semiconductores, tierras raras y barreras comerciales, en un intento por estabilizar la relación después de meses de recriminaciones mutuas por el incumplimiento del pacto de Ginebra.
Li Chenggang, viceministro de Comercio de China, destacó que ambas partes presentarán un informe a sus líderes sobre lo acordado en Londres.
“Esperamos que los avances logrados en esta reunión contribuyan a una mayor confianza entre China y Estados Unidos”, declaró.
Este nuevo entendimiento reemplazaría parcialmente un acuerdo anterior en el que EE. UU. se había comprometido a reducir sus aranceles del 145% al 30%, y China del 125% al 10%, con una ventana de 90 días para renegociar. Con el anuncio de hoy, Trump eleva los aranceles al 55%, aunque señala que esto se hará dentro del marco general pactado en Londres y “con plena cooperación de Beijing”.
En un segundo mensaje en Truth Social, Trump aseguró que trabajará “en estrecha colaboración” con Xi Jinping para abrir el mercado chino a los productos estadounidenses, especialmente en sectores tecnológicos y agrícolas.
“¡Esto será un gran TRIUNFO para ambos países!”, enfatizó, marcando un tono más optimista respecto a los esfuerzos bilaterales, en contraste con los duros intercambios de los últimos años.