¿Cómo elegir un colchón individual?

¿Duermes solo y no tienes mucho espacio en tu habitación? Entonces los colchones individuales son la mejor elección para garantizar tu comodidad y que tenga las dimensiones adecuadas.

El tamaño del colchón no interfiere en la calidad que puedes encontrar y en la amplia variedad de opciones, no importa si buscas de muelle, resortes, espuma o látex. Pero, ¿qué características debes buscar? Conócelas.

¿Qué ver antes de comprar un colchón individual?

Lo primero que salta a la vista es el tamaño, los colchones individuales miden 100 cm de ancho por 190 cm de largo, el suficiente espacio para que una persona de estatura y peso promedio esté cómoda.

Ahora que conoces sus dimensiones, es momento de revisar los puntos críticos para decidir.

Nivel de firmeza

Al comprar colchones individuales, matrimoniales o de otro tamaño, la firmeza es un punto que nunca debes pasar por alto.

Encontrarás modelos en los que te sentirás sobre una nube y otros en los que no te hundirás ni un centímetro. Elegir entre uno u otro dependerá tanto de tus gustos como de si tienes algún problema de salud en tu espalda o tienes sobrepeso.

Firmeza suave: al ser blando permiten un hundimiento hasta de 7 cm, se amoldan al cuerpo y se recomiendan a personas con osteoporosis, dolores de cadera o si de forma habitual duermen de lado.
Firmeza media: también llamados colchones de confort universal, son los más vendidos. Su firmeza está en un punto medio, dando comodidad y soporte a la columna y buen alivio de la presión. Para quienes les gusta dormir boca arriba son los colchones ideales.
Firmeza alta y extra alta: para las personas que duermen boca abajo, tienen un peso mayor de 100 kg o padecen de forma frecuente de dolores de espalda son la opción recomendada. Su diseño y materiales no permiten que el cuerpo se hunda ni se amolde a su forma.

Fuente: Freepik

Tipo de usuario

Hay muchos tipos de colchones y de acuerdo a quién lo usará deberás evaluar algunos criterios para garantizar un sueño reparador.

Bebés: a partir de los 2 años, muchos bebés pasan de la cuna a una cama con colchón individual utilizando protecciones laterales para evitar caídas. En estos casos, el colchón recomendado es uno de firmeza media o alta, esto para evitar accidentes por hundimiento. Algunas buenas opciones pueden ser los de látex o espuma.
Niños: si el colchón es para un niño de 5 años en adelante la firmeza adecuada es media, una opción más suave dificultaría el sueño, ya que a edades tempranas los pequeños suelen moverse mucho mientras duermen. Los colchones de muelle son muy recomendados para estas edades.
Adultos: de acuerdo con la etapa las necesidades irán cambiando. Para los adultos jóvenes sanos, la firmeza media y colchones de resortes o de espuma son buenas alternativas. Mientras que si se trata de adultos mayores, se deben elegir colchones suaves, de firmeza baja, en especial si sufren de dolor en los huesos o enfermedades como la osteoporosis.

 

Tratamiento antiácaros

Los colchones antiácaros se someten a tratamientos especiales que crean una barrera invisible, imperceptible e inofensiva para el humano, pero que lo protege de bacterias, insectos y parásitos.

Los modelos con esta protección son los más recomendados para bebés, niños, adultos mayores y personas con alergias, aunque cualquier persona puede beneficiarse de este sistema.

Los ácaros son insectos muy pequeños que entran a casa sin siquiera notarlos y suelen estar presentes en muebles, peluches, cojines, almohadas y colchones. Cuando hay personas con alergias o niños pueden ser causantes o empeorar enfermedades como el asma.

Comprar colchones individuales es una inversión, por esto debes estar atento a la calidad del producto, sus materiales, tecnología y la comodidad que te ofrece.

Después de todo, es donde podrás descansar y reponer las energías del día, lo que influye directamente en la salud. Al buscar el modelo ideal de colchones individuales, recuerda revisar todos estos puntos, así, sumado a la garantía, puede durarte de 1, 5 o hasta 10 años.