Guanajuato, Guanajuato.– La única votación unánime entre los cinco dictámenes relacionados con el aborto fue la de educación sexual integral y reproductiva. El pleno del Congreso la aprobó sin que ningún legislador se manifestara en contra.
Se trata de reformas a la Ley de Educación para el Estado de Guanajuato, en las que se establece que la educación sexual y reproductiva implica el ejercicio responsable de la sexualidad, la planificación familiar, la maternidad y paternidad responsables, la prevención del embarazo adolescente y de infecciones de transmisión sexual, así como la detección de conductas de riesgo.
Las autoridades educativas deberán coordinarse con la Secretaría de Salud para impulsar acciones afirmativas que promuevan la educación sexual integral y reproductiva, la educación menstrual, la prevención del embarazo infantil y adolescente, y garantizar la continuidad escolar sin discriminación para estudiantes embarazadas dentro del Sistema Educativo Estatal.

La Secretaría de Educación de Guanajuato deberá también implementar programas formativos dirigidos a padres, madres, tutores o quienes ejerzan la patria potestad, sobre educación sexual integral y prevención del embarazo infantil y adolescente.
Asimismo, se establece la obligación de los padres de familia de participar en las actividades escolares relacionadas con estos temas. Las asociaciones de madres y padres deberán socializar la importancia de la educación sexual integral y reproductiva.
La diputada Martha Edith Moreno Valencia presentó el dictamen y destacó que el objetivo es impactar el marco normativo de la educación sexual integral, entendida como un proceso que fomenta el ejercicio responsable de la sexualidad, la planificación familiar, la prevención del embarazo adolescente y las infecciones de transmisión sexual.
Subrayó que esta educación ofrece información precisa y apropiada a niñas, niños y adolescentes sobre sexualidad, salud sexual y reproductiva, temas familiares, anatomía, respeto, relaciones sanas, consentimiento, pubertad, menstruación, anticoncepción, embarazo e infecciones.
La legisladora explicó que los embarazos tempranos generan complicaciones físicas y sociales para los adolescentes, y que la reforma busca prevenirlos mediante una educación especializada, con un enfoque preventivo.
Por su parte, la diputada del PAN María Isabel Ortiz Mantilla afirmó que el binomio esencial de la convivencia humana es la libertad con responsabilidad, por lo que es fundamental educar a niñas y niños en este principio para que comprendan las consecuencias de sus decisiones.
Expuso que la educación integral debe atender todas las dimensiones del desarrollo humano: física, emocional, social, psíquica, espiritual y ética. Además, sostuvo que educar no es solo informar, sino acompañar y formar en cada etapa, promoviendo la colaboración entre hogar, escuela y comunidad.
La diputada de Morena Miriam Reyes Carmona señaló que la educación sexual integral está vinculada con la salud pública, la equidad de género y los derechos reproductivos. Advirtió que las adolescentes enfrentan embarazos no deseados, violencia sexual, abandono escolar y estigmas sociales que limitan su futuro.
Informó que Guanajuato registra alarmantes tasas de embarazo adolescente, especialmente en menores de 15 años, lo que refleja una brecha en el acceso a información y derechos.
Aseguró que la educación sexual disminuye las conductas de riesgo, fomenta el uso de anticonceptivos y retrasa el inicio de la vida sexual. El dictamen, dijo, ofrece herramientas para la vida y representa una política pública en favor de la equidad de género.
También se pronunció a favor la legisladora Sandra Alicia Pedroza Orozco, quien consideró que el dictamen permite incidir en la formación de niñas, niños y adolescentes, y responde a la necesidad de implementar una verdadera política educativa en materia de sexualidad, alineada con la ley general en la materia.

Aclaró que no se trata de adoctrinar, sino de brindar herramientas y conocimientos para ejercer de forma responsable la sexualidad, planificar la familia y prevenir embarazos e infecciones de transmisión sexual, así como identificar conductas de riesgo.
Finalmente, el diputado Víctor Manuel Zanella Huerta expresó que la educación sexual y reproductiva es una necesidad urgente que requiere responsabilidad compartida. Afirmó que formar a niñas, niños y adolescentes implica prepararlos para cuidarse, y no solo ofrecer contenidos académicos.
Enfatizó que los contenidos educativos deben promover la conciencia sobre el cuerpo, relaciones sanas y paternidades responsables.
“Cuando se ocultan estos temas, se deja a las personas a merced de la desinformación, el abuso y el miedo”, concluyó.