Ciudad de México, México.- Dos integrantes del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco fueron asesinados a tiros la noche del miércoles por hombres armados que se desplazaban en motocicleta, confirmó este jueves la Fiscalía del Estado.
Las víctimas, identificadas como Carmen Morales y su hijo Jaime Ramírez, habían participado activamente en la denuncia del hallazgo de cientos de prendas y restos óseos en el rancho Izaguirre, ubicado en Jalisco y presuntamente utilizado por el narcotráfico para el adiestramiento forzado de jóvenes.
Según el testimonio de Raúl Servín, representante del colectivo, Morales ya había recibido amenazas antes del ataque.
“Lamentablemente ella ya había sido amenazada varias veces (…) es triste y doloroso que estén pasando estas cosas, las familias lo único que queremos es encontrar a nuestros seres queridos”, declaró visiblemente conmovido.
Las autoridades estatales informaron que, hasta el momento, no existen elementos que vinculen directamente el ataque con las actividades del colectivo.
Fiscalía niega vinulación con hallazgo de rancho Izaguirre

“No existen al momento elementos que indiquen que ello tenga relación con la actividad de su madre como integrante de un colectivo de búsqueda de personas desaparecidas”, señaló la Fiscalía en un comunicado.
No obstante, miembros del colectivo aseguran que las amenazas contra Carmen Morales eran conocidas entre los buscadores y temen por su seguridad. Las víctimas buscaban desde febrero de este año a un familiar desaparecido, en una zona marcada por la violencia y el silencio impuesto por el crimen organizado.
Con estas muertes, ya suman tres los integrantes del colectivo asesinados desde que se denunció el hallazgo en el rancho Izaguirre, un sitio que se ha convertido en foco de atención para las autoridades, luego de que el fiscal general Alejandro Gertz Manero reportara avances en las investigaciones y la detención de al menos 15 personas vinculadas al caso.

Jalisco es uno de los estados con mayor número de personas desaparecidas en el país. De acuerdo con cifras oficiales, más de 14 mil casos siguen sin resolverse. El estado es también bastión del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), organización a la que diversas autoridades han señalado por reclutar forzosamente a jóvenes y hacer desaparecer a quienes se oponen a sus actividades.

Los colectivos de búsqueda, conformados en su mayoría por madres y familiares de desaparecidos, han exigido al gobierno mayor protección y garantías para continuar su labor, que muchas veces suple la inacción o limitada capacidad del Estado.