Ciudad de México, México.- La historia de Maple, una perrita que viajó desde Miami a la Ciudad de México en la bodega de un avión y llegó ensangrentada, deshidratada y en estado de shock, ha causado indignación en redes sociales. Su caso fue compartido por sus cuidadores, Gabriel Gaitán y Lorena, a través de la red social X (antes Twitter), donde relataron la dramática experiencia ocurrida el pasado 15 de mayo.

La pareja explicó que, al aterrizar en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, pasaron más de 30 minutos sin recibir información sobre sus mascotas. Cuando finalmente les entregaron a Maple, notaron de inmediato que algo no estaba bien.
“Al abrir su transportadora, Maple estaba completamente asustada y herida. Le ofrecimos agua y vomitó sangre”, escribieron.
Ante el grave estado de salud de la perrita, fue trasladada de urgencia a un hospital veterinario, donde fue diagnosticada con afectación en los riñones por posible traumatismo. Según los últimos reportes compartidos por sus cuidadores, Maple sigue en proceso de recuperación.
Denuncian retraso por trámites sanitarios
A pesar de contar con toda la documentación necesaria para el ingreso de Maple al país, el proceso de atención médica se complicó debido a un requisito inesperado: un funcionario de SENASICA (Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria) solicitó que un veterinario externo verificara el estado de salud del animal antes de permitir su salida.

Este requisito retrasó la atención médica de Maple por más de cuatro horas, situación que, según sus dueños, pudo haber puesto en mayor riesgo su vida.
Aeroméxico responde: “No hubo maltrato”
Ante la viralización del caso, Aeroméxico emitió un comunicado el 24 de mayo en el que aseguró haber realizado una investigación interna. La aerolínea sostuvo que no hubo evidencia de maltrato durante el traslado de Maple.
“La transportadora no mostraba daños y los sellos de seguridad estaban intactos al momento de la entrega”, informó la empresa, añadiendo que ningún miembro del personal habría manipulado incorrectamente al animal.
Aeroméxico también puntualizó que el cumplimiento de los trámites sanitarios tras el vuelo no es responsabilidad de la aerolínea, sino de las autoridades competentes.
Llamado a revisar protocolos para transporte de animales

El caso de Maple ha reavivado el debate sobre las condiciones en que viajan las mascotas en vuelos comerciales, especialmente cuando deben ir en la bodega por su tamaño. Organizaciones defensoras de los derechos de los animales han aprovechado la ocasión para pedir a las aerolíneas mayor transparencia y supervisión en el transporte de seres vivos.
En redes sociales, usuarios expresaron su solidaridad con los cuidadores de Maple y exigieron a las autoridades mexicanas y a la aerolínea revisar los protocolos actuales, a fin de evitar que casos como este se repitan.
Mientras tanto, Gabriel y Lorena esperan que su testimonio sirva para generar conciencia y proteger a más animales que, como Maple, solo intentaban regresar a casa.