Ciudad de México, México.- A poco menos de un mes de concluir su mandato como Gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro sorprendió a la opinión pública con su anuncio de renunciar a la política y mudarse a Europa para cumplir su sueño de dedicarse al fútbol.

En una entrevista con el diario El País en noviembre de 2024, el exmandatario confirmó su decisión de estudiar en España para formarse como entrenador de fútbol.

“Voy a intentar cumplir ese sueño que tengo de dedicarme al fútbol”, expresó Alfaro en ese entonces.

El político emecista, de 51 años, hizo pública su intención de estudiar el Máster en Dirección de Fútbol de la Escuela de Posgrado del Real Madrid, una institución de prestigio mundial. La tarifa del curso para el periodo 2023/2024 es de 14,300 euros, aproximadamente 274,417 pesos mexicanos.

 
Enrique Alfaro renuncia a la política para estudiar fútbol en Europa, dejando atrás una gestión marcada por la inseguridad y altos índices de desapariciones (Foto: Twitter)

 

 

Tras dejar el poder el 6 de diciembre, Alfaro se trasladó inmediatamente a Europa. A principios de febrero, el exgobernador estuvo en Róterdam, Países Bajos, donde visitó la Academia del Feyenoord, como parte de su formación en el máster del Real Madrid. Mientras tanto, disfrutó de unas vacaciones en España y Suiza junto a su familia, lo que generó críticas en redes sociales debido a la situación de inseguridad que dejó en Jalisco.

De vacaciones tras un gobierno cuestionable

 
Enrique Alfaro renuncia a la política para estudiar fútbol en Europa, dejando atrás una gestión marcada por la inseguridad y altos índices de desapariciones (Foto: Twitter)

El gobierno de Enrique Alfaro fue marcado por elevados índices de violencia, desapariciones forzadas y una creciente crisis en materia de seguridad pública. A pesar de que Jalisco se mantiene como la entidad con más personas desaparecidas en el país —con un alarmante total de 14,970 desaparecidos hasta 2023—, Alfaro dejó la administración sin reportar las cifras oficiales de desapariciones al Registro Nacional de Personas Desaparecidas, según denuncias de varios expertos y activistas. Durante su gestión, las desapariciones crecieron un 35.41% respecto a la administración de su antecesor, Aristóteles Sandoval.

Además, Jalisco fue identificado como uno de los estados con más fosas clandestinas del país, con al menos 317 hallazgos documentados desde 2006. A nivel estatal, las autoridades han sido criticadas por no actuar de manera efectiva ante la localización de estos lugares, como en el caso del rancho Izaguirre en Teuchitlán, hallazgo realizado en septiembre de 2024.

La Fiscalía de Jalisco asumió el control del lugar, pero ha sido acusada de no hacer lo suficiente para esclarecer el origen de los restos humanos hallados en la zona, presumiblemente relacionados con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).

 

 

En un contexto político tenso, muchos cuestionaron la rápida salida de Alfaro de Jalisco en medio de la crisis de seguridad. Incluso, su paso por el gobierno de Jalisco ha sido objeto de escrutinio por quienes afirman que, durante su administración, hubo omisiones y complicidad con las estructuras criminales.

“Enrique Alfaro siempre supo cómo se mueve el narcotráfico en Jalisco y, por supuesto, su responsabilidad en todo esto es total”, afirmó Roberto Castelán, investigador y académico, en una entrevista con Los Periodistas.

A pesar de su partida, los cuestionamientos hacia su gestión persisten. En enero de 2025, el actual Gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, quien no fue el candidato preferido por Alfaro, se reunió con él en Madrid. Según fuentes cercanas, en esa reunión también se abordaron temas políticos y la situación del estado, lo que alimentó rumores sobre su posible retorno a la política.

 
Enrique Alfaro renuncia a la política para estudiar fútbol en Europa, dejando atrás una gestión marcada por la inseguridad y altos índices de desapariciones (Foto: Twitter)

Aunque Alfaro sigue afirmando que su futuro estará en el fútbol, no es un secreto que uno de sus mayores deseos es regresar a su tierra natal para dirigir al Club Guadalajara, las “Chivas”, equipo con el cual tiene una relación cercana debido a su amistad con el dueño, Amaury Vergara.

Enrique Alfaro cerró un capítulo en la política jaliscienses dejando un estado con cifras alarmantes en materia de desapariciones, violencia y crimen organizado. Sin embargo, su decisión de abandonar la política y emprender una nueva etapa en el fútbol, en medio de la creciente inseguridad y las promesas incumplidas, deja abiertas muchas preguntas sobre el legado de su gestión.