Abasolo, Gto.- En Abasolo, Guanajuato, se llevaron a cabo obras de rehabilitación en la unidad deportiva, un espacio emblemático para la comunidad que había presentado deterioro con el paso del tiempo. Sin embargo, más allá de las mejoras físicas, el cambio que más llamó la atención fue el de color: el tradicional verde, distintivo de la administración anterior del PRI, fue sustituido por el color marrón, que representa a la actual administración de Morena.

Cambio de color polémico

Este cambio cromático no pasó desapercibido entre los habitantes, quienes lo interpretaron como un símbolo de la transición política en el municipio. Mientras que algunos ciudadanos celebraron la renovación del espacio y la modernización de sus instalaciones, otros cuestionaron el enfoque en el cambio de color, argumentando que debería priorizarse la funcionalidad y el mantenimiento de los servicios públicos sobre los aspectos simbólicos.

 
Se refleja cómo los cambios en la infraestructura pública pueden convertirse en un tema de debate foto: Archivo

Este hecho refleja cómo los cambios en la infraestructura pública pueden convertirse en un tema de debate, especialmente cuando se vinculan a la identidad política de las administraciones. Mientras algunos ven en estas acciones una renovación necesaria, otros las perciben como un intento de marcar territorio en el ámbito político.