Ciudad de México, México.– La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció este martes una serie de acciones contra Estados Unidos por la imposición unilateral de aranceles del 25% sobre las exportaciones mexicanas.
La medida, que entró en vigor desde las 00:00 horas del mismo día, fue confirmada por el gobierno de la Casa Blanca la noche del 3 de marzo, desatando una serie de reacciones en el país vecino y en México.

El contexto de la medida de EE. UU.
La decisión del gobierno de Donald Trump de aplicar los aranceles afectó a los productos que México exporta a Estados Unidos, uno de sus mayores socios comerciales. Aunque ambas naciones habían trabajado en conjunto durante los últimos meses en la lucha contra el crimen organizado y el tráfico de fentanilo, la imposición de los impuestos fue vista por la presidenta Sheinbaum como una medida “unilateral” e injustificada.
En su intervención desde Palacio Nacional, la mandataria subrayó que el gobierno mexicano había cumplido con los acuerdos alcanzados con EE. UU. para pausar la entrada en vigor de los aranceles y había demostrado avances importantes en materia de seguridad, incluidos resultados contundentes contra el narcotráfico y la delincuencia organizada.

De hecho, las cifras de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. mostraron una reducción del 50% en las incautaciones de fentanilo provenientes de México entre octubre de 2024 y enero de 2025.
Resultados en materia de seguridad
Sheinbaum detalló una serie de acciones que el gobierno mexicano ha llevado a cabo en los últimos meses, lo que refuerza su postura de que no hay justificación para los aranceles.
Entre los logros que destacó se encuentran el aseguramiento de casi 7,000 armas de fuego (en su mayoría provenientes de EE. UU.), la incautación histórica de 26.4 toneladas de cocaína, y la detención de miles de personas relacionadas con delitos de alto impacto. Además, hizo hincapié en la reducción del 15% en los homicidios dolosos en México desde que asumió la presidencia.
También recordó que México ha cooperado activamente en la lucha contra el tráfico de fentanilo, pero insistió en que es un problema de salud pública que también debe ser atendido en EE. UU., un país que, según datos de la Comisión de Sentencias de EE. UU., tiene un alto porcentaje de detenidos y procesados por tráfico de drogas de origen estadounidense.
“La crisis de opioides en Estados Unidos es una responsabilidad interna que deben enfrentar”, afirmó.
El llamado a la unidad y la defensa de la soberanía

La presidenta también hizo un llamado a la unidad del pueblo mexicano, pidiendo “cabeza fría” ante los desafíos que se avecinan. Invitó a la ciudadanía a concentrarse el próximo domingo en el Zócalo de la Ciudad de México, donde se llevará a cabo una audiencia pública para discutir la situación y las posibles medidas a tomar.
“La cooperación sí, la subordinación no. México es una nación soberana, y no aceptaremos medidas que violen los acuerdos previos. Los mexicanos debemos estar unidos frente a este tipo de agresiones”, enfatizó Sheinbaum.
En un tono firme, destacó que México no es un país que permita la intervención externa y que, si bien se continuará colaborando con Estados Unidos en los temas de seguridad y narcotráfico, el país no aceptará imposiciones unilaterales que afecten a su economía y a sus ciudadanos.
Un llamado a la responsabilidad compartida
Además, la mandataria destacó que las autoridades estadounidenses también deben hacerse responsables de la lucha contra los grupos criminales que operan en su territorio. En este sentido, Sheinbaum hizo un llamado a EE. UU. a frenar la llegada de precursores químicos para la fabricación de fentanilo y otras drogas a través de sus puertos y aeropuertos, y a atacar con mayor contundencia la producción, distribución y venta ilegal de estas sustancias en su territorio.