DE SU RONCO PECHO…
“No puede quedar solamente en un puñado de personas la decisión porque hoy más que nunca tenemos que escuchar al ciudadano, qué quiere y qué vota. Vamos a escuchar al ciudadano. No podemos pecar de soberbia, creyendo que una, dos, cuatro o cinco personas tenemos la verdad absoluta y no escuchamos al resto de la ciudadanía… En otras partes del país se ha entendido esto; que cuando te alejas del ciudadano, cometes los errores más garrafales. Hoy el PAN más que nunca tiene que regresar a sus orígenes”.
Alejandra Gutiérrez Campos
La alcaldesa de León no se quita y sigue derecho por la candidatura a gobernador
ALEJANDRA GUTIÉRREZ: ¿GUBERNATURA O NADA?
Frente a la persistencia de Alejandra Gutiérrez Campos para ser candidata panista a la gubernatura, son el mandatario Diego Sinhue Rodríguez y sus operadores que -de facto- dirigen al partido, los responsables y encargados de definir la siguiente señal del tono y el modo en que se va a dirimir esa contienda.
Para empezar, tendrían que olvidarse de los mensajes y las presiones para que la alcaldesa de León decline sus intenciones porque ella sigue en la misma; no se raja.
Marko Cortés, el dirigente nacional panista, debe estar mareado con tanta petición desde Guanajuato. Gutiérrez Campos le pide un método abierto a la sociedad, un símil de lo que hace el frente opositor federal, un pull de encuestas, pero no descarta una interna entre puros militantes.
Del otro lado la solicitud es que el líder nacional se allane al “proyecto del gobernador” que obviamente es la candidatura de la titular de la Secretaría de Desarrollo Social y Humano, Libia Dennise García Muñoz Ledo.
Y ya entonces los protagonistas dirán cómo va: si ellos quieren, puede haber choque de trenes, jaloneos y las pugnas tradicionales que hay en una disputa a la candidatura, fuego amigo y hasta tintes de guerra sucia que distinguieron en su momento al PAN.
Claro, los dueños del balón son los del oficialismo azul y ellos tienen la sartén por el mango para aterrizar el “como quieran quiero” que lanzó Libia Dennise García hace unos días.
Gutiérrez Campos ya pintó su raya. El tono se define en Palacio porque desde ahí es donde ha habido resistencia para que haya una competencia entre la titular de Sedeshu y la alcaldesa y desde ahí se han enviado los mensajes para tratar de bajar de su aspiración a la presidenta municipal directamente o a través de eventos que pretenden orillar a declinar su posición.
Han sido varios los intentos. Hay demasiadas señales que se envían en radiopasillo desde ambos frentes que pueden sacar chispas y detonar una disputa de antología.
Pero también está en manos del gobernador Diego Sinhue Rodríguez desactivar cualquier posibilidad de crisis o de pugna para que todo transcurra civilizadamente.
La alcaldesa Alejandra Gutiérrez quiere un proceso similar a lo nacional, pero sabe que a estas alturas ya no puede ponerse exigente y quererla con moño. Con que esté peinada es suficiente. No va a ser fácil que acepten un método mixto. Así que irían a una interna.
Y ya lo comentamos aquí. Colocarse en esa instancia es apenas un pasito. Seguirá a contracorriente y en calidad de no favorita.
‘ALITO’ EN GUANAJUATO HACE CUATRO AÑOS: LA VERBORREA DE SIEMPRE
El PRI en Guanajuato lleva varios años muriendo lento, principalmente porque sus propios dirigentes se hacen el harakiri con compromisos que no sólo no cumplen, sino que reivindican los vicios que tienen sumido al tricolor en el tobogán del que no sale en el terruño.
Hace exactamente cuatro años, Alejandro Moreno Cárdenas visitaba Guanajuato en campaña junto a Carolina Viggiano y ofrecía terminar en el tricolor con los campeones de las plurinominales. Hoy sabemos que fue un mal chiste.
Una promesa más tirada por la borda. En aquel momento, Moreno Cárdenas llegó a Guanajuato cobijado por un PRI en el que Yulma Rocha y Alejandro Arias llevaron la voz cantante en un evento en Irapuato.
Luego, se realizó una comida privada que ofreció Hugo Varela en su domicilio particular en León en la que no estuvieron aquellos. Los promotores fueron el entonces diputado José Huerta y Rigoberto Paredes, además de ‘Pepechuy’ Padilla.
Eventos en los que, por enésima vez, el priismo guanajuatense era reconocido por su estoicismo para resistir casi tres décadas de gobiernos panistas, aunque lo más doloroso para los tricolores ha sido el abandono de sus dirigentes nacionales.
‘Alito’ Moreno hablaba de desterrar los males que padece el PRI, particularmente la toma de decisiones cupulares y la prevalencia de los campeones de curules plurinominales.
Un año antes, por estas fechas, en 2018, un grupo de jóvenes priistas lamentaban el descalabro de aquellos comicios.
“Saludos, élite priista, mi nombre no es importante, tampoco mi edad, mucho menos mi cargo, lo único que importa es que soy priista, de los que sienten, de los que aman (…) no un militante más, somos los que sufrimos por los resultados pasados, quienes lloramos cuando perdimos y somos nosotros quienes nos levantamos a reinventar al partido”.
Pura verborrea y poca acción. Cuando ‘Alito’ estuvo en Guanajuato, recetaba el mismo discurso de sus antecesores. Ni la burla perdonaban.
“No tuvimos buenos resultados (en el pasado proceso electoral), pero Guanajuato será prioridad; nunca más Guanajuato abandonado, nosotros no vamos a permitir un partido donde quieran tomar decisiones unos cuantos”.
Moreno Cárdenas se refería al 2018, pero nada mejoraron las cosas tres años después con él como dirigente. Alejandro Arias, Yulma Rocha y Ruth Tiscareño se perfilaban como los nuevos franquiciatarios, aunque luego la irapuatense se distanciaría del binomio cuando ambos agandallaron la dirigencia estatal.
Al final, los resultados hablan por sí solos. El PRI está peor que como lo tomó Alejandro Moreno que se aferra a la alianza con el PAN, mientras sus dirigentes en Guanajuato andan en las mismas. Un partido entregado al PAN-Gobierno y sin más aspiración que la de sus dirigentes de repartirse el botín de las plurinominales y las pocas candidaturas con posibilidades de triunfo.
LIBIA HASTA EN LA SOPA
Desde Palacio de Gobierno los estrategas del oficialismo siguen al pie de la letra con la apuesta “Libia hasta en la sopa” para colocar el nombre de su precandidata a la gubernatura en boca y en mente de todos, aunque a veces parezca muy forzada la aparición de la secretaria de Desarrollo Social y Humano.
Vamos. Es natural el rol que asume al ser titular de Sedeshu como señora dadora de apoyos a diestra y siniestra. Ya encabezó un evento descomunal en el lanzamiento de la tarjeta Mujeres Bienestar en el Parque Bicentenario ante más de 20 mil ciudadanas.
Suena lógico -en el posicionamiento que buscan- que reúna a miles de comerciantes de todo el estado para darles a conocer apoyos y lo mucho que los apapacha el gobierno estatal y que Diego Sinhue se las encargue.
Y por supuesto que en la vertiente de ‘Mujeres Grandeza’ no podía faltar el apoyo para las madres y sus bebés, como ocurrió esta semana en Celaya. Y vendrán más: su aparición en un evento con jóvenes deportistas que participan en un torneo estatal de futbol, becas y otros más.
Pero que ahora resulte la redentora para el regreso del futbol profesional, sí ya parece no solo demasiada crema al taco, sino que se trata de un asunto que ya genera una mayor división de opiniones, no por la plaza irapuatense que merece un equipo profesional, sino por lo que representan los apoyos al deporte profesional.
Algo similar al préstamo para que Grupo Pachuca comprara el Estadio, este sí, semioculto o por lo menos sin la transparencia que merece un favor de ese tamaño para una empresa privada: un préstamo con abonos e intereses chiquitos para quienes lucran con el deporte.
Ahora, el tema tiene que ver con el apoyo para la remodelación del Sergio León Chávez y el gobernador sacrifica espacio para dejar toda la escena libre a su favorita para sucederlo, la funcionaria omnipresente.
Luego se les olvida a los padrinos que cantidad no significa calidad y que hay incursiones que parecen más naturales. Por ejemplo, que García Muñoz Ledo siga teniendo contacto con madres buscadoras de desaparecidos, con notarios que quieren mantener el contacto, con transportistas que hicieron buena química con ella.
Eso es más creíble, aunque evidencie los vacíos que deja el secretario de Gobierno, Jesús Oviedo que no puede alcanzar el “punch” que tuvo Libia Dennise como operadora política y sus tablas para hacer interlocución con adversarios políticos o líderes de agrupaciones y gremios que no son nada sencillos en la mesa.
Diego Sinhue tiene ahora a Libia Dennise en una posición más lucidora, aunque, por otro lado, haya perdido a quien mejor ha desempeñado ese cargo a lo largo del sexenio. Que les pregunte a las agrupaciones si no es cierto.
Por eso desconciertan esas señales. La propaganda y el posicionamiento de la omnipresente precandidata tiene sus límites y sus asegunes. Libia hasta en la sopa, no siempre es la respuesta.
Lo retro está de moda hasta en política, pero no siempre ayuda el pasado. A veces estorba y hasta puede restar. Ahí están las bravuconadas del expresidente Vicente Fox quien hace unos días, por querer ayudar a Xóchitl Gálvez, insultó a los aspirantes morenistas solo para dar la razón a sus críticos y adversarios que lo ven pasado de moda y sin el “punch” que lo convirtió en el crítico más implacable del viejo sistema político que comenzaba a agonizar hace 28 años, cuando llegó a la gubernatura y retaba a los mandones de entonces.
Sucede que ahora su alianza es con aquellos a quienes fustigó. Hay maderas que difícilmente agarrarán el barniz.